Buscar en este blog

lunes, 28 de marzo de 2016

Ya puestos a cambiar el título, para qué intentar, sin conseguirlo, parecerse al original, distorsionando, una vez más todo el cariz de la película. Nadie duerme, no hay pesadillas en esta película.

Lo que sí hay, es una muy buena actuación de Jack Black, mucho más contenido que en otras y por ello mucho más efectivo en darle credibilidad al personaje, y un muy buen guion y dirección, con muchos mensajes formulados en el más puro lenguaje cinematográfico, en referencia a la relación entre el personaje del escritor (Jack Black) y el muñeco causante del caos reinante durante la película.

Destaca también la actuación de reparto del jóven Ryan Lee, sin el cual la película no habría sido lo mismo. 

Marguerite

Se asoma el cine francés de nuevo y en esta ocasión con esta sorprendente y gratificante experiencia cinematográfica, de la que pronto nos viene un igualmente interesante "remake" de Hollywood (ya los remakes se hacen en paralelo a los originales). La versión americana parece que se va a centrar más en lo comico de la historia (basada en hechos reales, como bien saben nuestros célebres Gomaespuma); en Marguerite no me pude reir de  situaciones verdaderamente cómicas porque me vencía la pena por la protagonista.


London has fallen (Objetivo: Londres)

Esta película, al igual que su antecesora "Objetivo: La Casa Blanca" es de esas películas que no defraudan, porque uno sabe a lo que va, y porque le gusta lo que espera ver, y lo obtiene con creces. Trepidante, en permanente acción y, naturalmente, de temática muy actual.

¡Ave, César!

Con los hermanos Coen me pasa lo mismo que, en menor medida, con Woody Allen. En aras de una gran película (Fargo) les doy una y otra vez una nueva oportunidad debido a que en mi memoria inconsciente (en ambos sentidos de la palabra) son unos grandes directores. Por ello acabé tragándome bodrios como "O Brother", "No es país para viejos" y ahora, éste.

Creo que ya me voy convenciendo de que en realidad, son unos artistas... en capitalizar el éxito de un único producto de calidad para vender estas películas cada vez más aburridas.

El viaje de Arlo (The Good Diosaur)

Quién sino Pixar iba a ser quien diera una nueva vuelta de tuerca a la animación, con una innovacion ta genial como simple: para qué gastar innumerables recursos en reproducir infográficamente lo que se puede grabar con una cámara? todos sabemos cómo uno de los mayores retos de los estudios de animación es recrear de una manera creíble fenómenos como la superficie de un mar agitado, o un campo de cereales bajo el viento, o un bosque a merced de un temporal. Pues en esta película todos estos elementos paisajísticos han sido grabados en exteriores, siéndoles superpuestos después los elementos de animación, eso sí de una manera que resulta prácticamente indistinguible donde empiezan aquéllos y terminan éstos.

Lo volveremos a ver en la nueva versión de El Libro de la Jungla, que promete, y no sólo por este modo de abordar la animación.